Si tienes cicatrices en el rostro debido a un accidente o quemadura, es posible que te interese conocer los tratamientos estéticos más recientes. Las cicatrices faciales pueden ser un gran problema para algunas personas, ya que pueden dar un aspecto irregular a la piel. Los tratamientos para cicatrices faciales permiten una recuperación rápida de la zona tratada, son seguros, efectivos y en muchos casos, reemplazan la necesidad de cirugía.
No todas las cicatrices faciales son iguales y por lo tanto, no deben ser tratadas de la misma manera. Hay cuatro tipos principales de cicatrices faciales: cicatrices normales, cicatrices atróficas, cicatrices hipertróficas, queloides y contracturas. Las cicatrices atróficas son las más comunes en el rostro y se producen por el acné o tras haber pasado la varicela, mientras que las hipertróficas se muestran como elevaciones gruesas del tejido que sobrepasan el nivel de la piel. Las contracturas se producen por quemaduras o escaldaduras, y provocan una especie de deformación en la zona afectada. Cada tipo de cicatriz requiere un tratamiento específico para su eliminación.
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